Por Ivette Fernández Sosa
Corresponsal jefa en Colombia
No obstante, mucho potencial queda aún por explotar entre ambas naciones y así lo reconoció en entrevista con Prensa Latina el embajador cubano en Bogotá, Javier Caamaño.
Según comentó el diplomático, una de las tareas que se propone la legación en suelo neogranadino es lograr que las relaciones siempre sean bonitas y sólidas, que cada vez se fortalezcan más y que no exista variable capaz de modificar esa condición.
“En estos momentos, como en otros anteriores, las relaciones son de mucho respeto e incluso de admiración mutua. Las relaciones de Gobierno a Gobierno han sido amplias e históricas. En el sistema de Naciones Unidas, Colombia y Cuba han coincidido mucho, y en los mecanismos de integración y concertación políticas regional están muy bien”, afirmó.
A juicio de Caamaño, una de las más grandes prioridades de trabajo bilateral está en el ámbito económico, comercial y de inversión.
“Colombia tiene todo lo que necesita Cuba, productos de alta calidad con buenos precios y cercanía geográfica, el cambio del dólar nos favorece y tenemos conexiones marítimas para poder trasladar esos productos”, apuntó.
Recordó que el pasado año llegaron procedentes de la nación sudamericana 60 contenedores de huevos a la isla y estimó que esa cifra podría más que quintuplicarse.
Sin embargo, señaló que la proyección persigue el establecimiento de un intercambio en el que Cuba gane en buenas prácticas y pueda acceder a trasferencias tecnológicas, de manera que la producción se estimule en el país caribeño.
“Nuestra idea es hacer negocios con los empresarios para que el huevo se produzca en Cuba, para ir dependiendo cada vez menos de la importación. La solución para Cuba no es importar sino producir, pero mientras se llega a esa fase es necesario importar”, sostuvo.
También reconoció grandes potencialidades en la esfera ganadera, pues Colombia cuenta con 30 millones de cabeza de ganado, una sapiencia ganada en el ámbito genético, así como la aplicación de métodos ya conocidos en Cuba como el pastoreo Voisin y el semipastoreo.
Destacó entonces que hace un año y medio solo dos mataderos podían exportar carne a Cuba pero que, tras un trabajo realizado entre las autoridades sanitarias de los dos países, cualquiera de estos centros puede vender a la isla una gran variedad de productos, entre los que se halla el pollo, la res, el cerdo, la leche y todos sus derivados.
Caamaño celebró que ya estén vigentes todos los permisos para llevar a Cuba huevo de consumo y también aquel fertilizado y, en el caso de la ganadería, existen las autorizaciones para comercializar semen, embriones y animales vivos, por lo cual están creadas todas las condiciones para un intercambio más amplio, según afirmó.
DEFENSA DE TEMAS DE INTERÉS MUTUO
Como parte del diálogo, el embajador informó que en el transcurso de este mes de enero, se celebrará en La Habana la reunión de Mecanismos de Consultas Políticas entre Cuba y Colombia.
Añadió que también se tiene prevista una revisión sobre asuntos migratorios, y otro encuentro de la Comisión Mixta para evaluar los proyectos en temas de colaboración y cooperación, más las cuestiones del ámbito educativo-cultural.
“Todas esas reuniones van a tener lugar en enero, unas en La Habana y otras en Colombia, por tanto, se puede afirmar que la relación bilateral está en un buen momento”, comentó.
Caamaño aprovechó asimismo para reconocer la postura transparente, pública y notoria asumida por el Gobierno del presidente Gustavo Petro en contra de la inclusión de Cuba en la lista de países que supuestamente patrocinan el terrorismo y también por los pronunciamientos en contra del bloqueo que Estados Unidos impone a la isla.
“Este Gobierno llegó al poder el 7 de agosto de 2022. El 11 de agosto estaba en La Habana el excanciller Álvaro Leyva haciendo un acto público de reivindicación a Cuba por una postura anterior que desafortunadamente llevó a la isla a estar en esa lista”, evocó.
Recordó que esa clasificación fue resultado de una decisión política torpe y absurda que creyó que se le podía pedir a un país garante -como lo era y es Cuba en las negociaciones con la guerrilla Ejército de Liberación Nacional-, que capturara a una parte negociadora y se la entregara a la otra.
“Eso no tiene sentido ni precedentes, y no existe ninguna posibilidad de que un país garante haga eso porque se acabarían las negociaciones en el mundo”, expresó.
Sobre los procesos que se acometen para lograr la paz con los grupos armados en Colombia, aseveró que Cuba está convencida de que la única salida al conflicto armado interno es la solución negociada.
“Todo lo que el Gobierno y la contraparte consideren que Cuba como garante puede hacer para ayudar, pueden estar seguros de que, si es posible, lo haremos. Pero los únicos que pueden hacer la paz en Colombia son los colombianos, los extranjeros solo podemos ayudar en lo que se nos pida”, afirmó.
LOGROS Y DESAFÍOS
El embajador enumeró además algunos de los logros más significativos de la misión durante el año que recién concluyó, lo cual atribuyó a la consolidación de un equipo que alcanza cada vez más resultados y gana en motivación.
Entre estos, se reanudaron los vuelos de la aerolínea Avianca de Bogotá a La Habana, con lo cual llegan a 12 las frecuencias semanales si se cuentan las cinco de la compañía Wingo.
“Avianca posee otra fortaleza y es que tiene conexiones con todos los países de Sudamérica y también en Centroamérica, o sea, se abren nuevas posibilidades para que todo ese turismo que viene del Cono Sur llegue a la capital de Cuba”, destacó.
Añadió que también en 2024 se produjeron muchas visitas de funcionarios colombianos a Cuba y viceversa, y eso es muy significativo porque muestra la vitalidad de las relaciones. Por otra parte, se fortalecen los nexos con las diferentes gobernaciones y alcaldías, señaló.
“Tenemos hoy un departamento consolidado en el tema de cooperación deportiva que es Antioquía, otro que tiene una relación histórica con Cuba que es Boyacá y con el cual pronto comenzará una amplia cooperación en deporte y educación, en tanto Córdoba tiene mucho interés en la colaboración deportiva”, detalló.
Reconoció igualmente Caamaño la realización de un donativo solidario con más de 10 toneladas de alimentos y medicinas por parte del Movimiento Colombiano de Solidaridad con Cuba y la Asociación de Cubanos Residentes.
En este acto, que tuvo mucho simbolismo porque reveló el cariño de un pueblo hacia otro, se involucraron la sociedad civil y el Estado colombiano, que puso un avión de la fuerza aérea y aportó insumos energéticos, apuntó.
La carga llegó a La Habana junto con el vicecanciller Jorge Rojas, quien encabezó una delegación en la que también estuvo la senadora Gloria Flórez y el representante a la Cámara Gabriel Becerra, que son los presidentes del grupo parlamentario de Amistad con Cuba en el Congreso de Colombia, especificó el diplomático.
Otro momento icónico del año fue la celebración del XXXIII Encuentro Nacional del Movimiento Colombiano de Solidaridad con Cuba desarrollado en Bogotá y al que asistió el presidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos, Fernando González, y el presidente del Grupo Parlamentario de Cuba de Amistad con Colombia, Elier Ramírez.
Ese evento, estimó Caamaño, marcó un momento de fortalecimiento del activismo solidario con la isla y logró rescatar y fortalecer el movimiento juvenil de solidaridad.
Por otra parte, refirió que existen insatisfacciones en cuanto al trabajo consular orientado a la gestión que se realiza con la comunidad cubana, compuesta por casi cinco mil personas.
“Tenemos que lograr una relación bonita y estable con todos los cubanos. Nos interesa acercarnos a los empresarios radicados aquí y queremos que ellos sientan que este es el momento para hacer negocios en su país”, expresó.
Manifestó además que también se busca una mayor interacción con los médicos residentes, quienes pueden convertirse en los mejores difusores de la calidad de la medicina y los productos biotecnológicos producidos en la isla.
“Hay muchas potencialidades para estrechar los lazos con la comunidad cubana”, enfatizó.
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