Por Daimarelys Pérez
Redacción de Cultura
Tiene muchas tareas. Ella lo sabe y lo reconoce, sin embargo, con su parsimonia habitual se desplaza con una pujanza que hace honor a sus méritos y disciplina.
En entrevista exclusiva con Prensa Latina, la poetisa, Premio Nacional de Literatura 2001, se refirió al concepto del Caribe como cultura, en lugar de espacio geográfico.
Nuestra naturaleza es tan rica, tan exótica; lo telúrico aquí es importante, sin embargo, el Caribe no es una sección que encaja en la geografía, expresó la escritora, también ensayista, periodista, y crítica literaria y teatral.
Cuando dirigí el Centro de Estudios del Caribe en Casa de las Américas hicimos un coloquio nombrado “El Caribe Americano”, en el sentido de Nuestra América; muchos estudiosos respetables piensan en esta región solo en las islas: las Antillas Mayores y las Antillas Menores, señaló.
Pero el flujo histórico, incluso, mirado todo eso desde el punto de vista de los desplazamientos, de las migraciones, es fundamental para nosotros, se ve como cultural, aclaró.
No somos solo el Caribe hispano, el francófono, el holandés; somos algo mucho más extenso, lo cual implica culturas y que llega hasta São Luís do Maranhão, en el nordeste de Brasil, capital del estado brasileño de Maranhão, añadió.
En su opinión, Salvador de Bahía, también en ese país, es una fuente extraordinaria caribeña porque El Caribe es el corazón de esas Américas nombradas por el Héroe Nacional cubano José Martí.
Acerca del concepto del Caribe cultural, Morejón ha traducido a importantes intelectuales caribeños, entre ellos, Jacques Roumain y René Depestre.
En sus declaraciones a este medio de prensa, argumentó sobre los antecedentes económicos de Cuba dentro del contexto regional.
Nuestra economía está hecha de la filosofía del despojo, como decía Fidel (Castro); la historia de esta nación se empapa de las economías de plantación, del azúcar, del café, del tabaco y la esclavitud, precisó.
Todos estos elementos juntos crearon las riquezas nuestras, pero no la fortuna de quienes generamos ese patrimonio o capital, sino de los dueños, puntualizó; por eso esta es una idea, un concepto muy importante.
La poetisa cubana agregó que no se puede ver al Caribe hasta la isla de La Española (Haití y Santo Domingo), por ejemplo, llega mucho más abajo, con zonas de Venezuela y de Colombia, lugares ricos en tradiciones, costumbres, territorios multiétnicos y multilingües, acotó.
Recordó el texto “Carta de Jamaica”, de Simón Bolívar (1815), escrito que era “Contestación de un Americano Meridional a un caballero de esta isla”, en el cual El Libertador expuso las razones que provocaron la caída de la Segunda República de Venezuela en el contexto de la independencia de esa nación.
En este ejemplar él decía: “Somos un pequeño género humano, que pertenecemos mucho más a África que a cualquier otra parte”, recordó la entrevistada.
Morejón es parte del Jurado del Premio Carbet del Caribe desde su fundación en 1990 y miembro del Consejo Asesor de Administración para el Bienestar de los Trabajadores en el Extranjero (OWWA, por sus siglas en inglés).
A sus libros “Piedra pulida”, “Elogio y paisaje”, y “La Quinta de los Molinos” les fue otorgado el Premio de la Crítica en 1986, 1997 y 2000, respectivamente.
También la escritora comentó acerca de la influencia de la cultura en los procesos sociales.
Esas dinámicas dentro de una sociedad son las que, precisamente, forman las culturas, analizó Morejón; nosotros en Cuba tenemos un vínculo natural con toda América Central, con toda América del Sur por la lengua.
Sobre el novelista y ensayista francés Édouard Glissant, nacido en Sainte-Marie, Martinica (1928-2011), quien fue un poeta del mestizaje, Morejón mencionó que este escritor siempre decía: “Yo escribo en presencia de todas las lenguas del mundo”.
De Glissant -creador de las concepciones de “criollización” y de “Todo-Mundo”- también tradujo textos acerca del concepto del Caribe en su aspecto cultural.
Su lengua era el francés y el creole, y la mía el español, por eso menciono los lazos que nos unen con este gran continente, sin desconocer el hecho el cual nos fue negado durante muchísimos años de hablarse lenguas indígenas, como el maya, el náhualt, el quechua, el aimara, pero pienso en todo esto como buenos aportes a la cultura e historia de la humanidad, explicó.
ENTREGA Y DEDICACIÓN, SUS MEJORES ARMAS
Al preguntarle qué repetiría si comenzara de nuevo sus estudios o su vida profesional, y tuviera que escoger entre la traducción, la escritura -y literatura en sentido general- y la dirigencia, la poetisa sin pensarlo respondió denotando su entusiasmo por dirigir, orientar, pero desde un punto de vista técnico, no político.
Lo importante es entregarse, creer en nuestros sueños, amar aquello para lo cual se ha puesto todo el empeño, como sea, con las condiciones que uno tenga; a veces tienes más recursos, a veces menos, pero lo importante es hacer. Y sí, me quedaría con la literatura y la traducción.
Celebramos, incluso, el día del traductor, aquí lo hicimos este año en la sede de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, y fue un encuentro muy bonito, con personas queridas, amigos, colegas, recordó.
Y, bueno, la literatura es la otra parte de mi mundo de ensueño, y también de realidad ¿por qué no?, y mi escudo, expresó.
La también periodista adelantó a Prensa Latina que está trabajando y muy pronto saldrán sus memorias, pero sin darle descanso al vuelo de su pluma con la cual puede escribir más poesías, ensayos. Si de trabajo se trata, eso no falta; sigo escribiendo poemas y confieso que siempre estoy inspirada, todo de la vida me cautiva, me mueve a producir, pero ahora estoy centrada en mis memorias, demoradas, subrayó.
Esa estaticidad es, sobre todo, porque he tenido una vida un poco agitada, demasiado para mí; otra razón es la falta de material, por eso las va a publicar la editorial del Icaic (Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos), comentó.
Ya mis memorias están casi listas, pero estoy en ese detalle, y creo que para enero, a principios de 2025, verán la luz, añadió.
SER REALISTAS Y OBJETIVOS
Su obra abarca una gran amplitud de temas. La mitología y la relación integracionista de los negros con la nación cubana mediante el mestizaje de culturas españolas y africanas en una identidad nueva.
La mayor parte de su producción apoya el nacionalismo y la Revolución; su trabajo también trata la historia de la esclavitud y la relación de Cuba y Estados Unidos, aunque no está dominada por los asuntos políticos.
En su obra se destaca el particular empleo de la ironía y el humor, así como la calidad intrínseca de una poesía muy lírica, íntima, espiritual, incluso erótica y hasta bucólica.
arb/mml/dpm