Así lo anticipó en entrevista con Prensa Latina el embajador cubano aquí, Rogelio Polanco, quien significó que tales atributos responden al hecho de que en estos 12 meses no solo se festejará el 65 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas, sino que Vietnam rememorará importantes acontecimientos de su historia patria.
“Para Cuba estas conmemoraciones forman también parte del acervo histórico de nuestra relación ejemplar con Vietnam”, subrayó el diplomático al referirse a la celebración de los 95 años de la fundación del Partido Comunista (PCV) y los aniversarios 50 de la liberación del Sur y la reunificación del país, y 80 de la independencia y Día Nacional.
Es además un año en el cual haremos numerosas acciones en diferentes ámbitos, en particular los intercambios de alto nivel político entre nuestros Partidos, Estados y Gobiernos, así como en los campos de la defensa, seguridad nacional y las relaciones exteriores, adelantó.
En este sentido, dijo, durante 2025 se producirán dos significativos acontecimientos, el primero de ellos será la sesión 42 de la Comisión Intergubernamental para la Colaboración Económica, Científica y Técnica, que tendrá lugar en esta capital en algún momento del primer semestre.
“Este será un momento importante para pasar revista a los avances en la cooperación bilateral y el cumplimiento de los diferentes acuerdos suscritos durante la visita de Estado a Cuba realizada por el secretario general del PCV y entonces presidente de la República, To Lam, en septiembre pasado”, señaló Polanco.
Asimismo, se realizarán el sexto encuentro teórico entre el PCV y el Partido Comunista de Cuba (PCC) y el Foro de pensamiento sobre la obra del presidente Ho Chi Minh y el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro, los cuales antecederán la realización, en 2026, del XIV Congreso Nacional del PCV y el IX del PCC.
NUEVA FASE DE DESARROLLO SUSTANTIVO Y SOSTENIBLE
Tal y como quedó refrendado en la Declaración Conjunta emitida al término de la visita de To Lam a La Habana, la misma llevó a la relación bilateral “a una nueva fase de desarrollo sustantivo y sostenible, en beneficio de ambos pueblos, por el socialismo, la paz, la cooperación y el desarrollo en cada región y el mundo”.
De ahí que en 2025 resulte fundamental continuar “promoviendo y profundizando fuertemente los mecanismos y acuerdos de cooperación existentes, y ampliarlos en esferas potenciales” que incluyan la inversión en ramas prioritarias como la agricultura, industria procesadora de alimentos, los productos farmacéuticos y la biotecnología.
Además, los servicios de salud, la energía, las telecomunicaciones, el turismo, la construcción, el transporte, las tecnologías de punta, la transformación digital y otros campos.
“Pensamos que este año será el del avance de proyectos relacionados con la producción de arroz en nuestro país con la participación de empresas vietnamitas, a partir de las facilidades e incentivos que se les han brindado”, comentó el embajador cubano.
Ésta -valoró – será una contribución de Vietnam al paulatino desarrollo de nuestra capacidad para avanzar hacia la obtención de la soberanía y la seguridad alimentaria.
Por otra parte, añadió, continuaremos en la búsqueda de empresas vietnamitas que estén en disposición de realizar inversiones en Cuba en otros sectores de la producción de alimentos, entre ellos maíz, huevos y productos cárnicos, así como de fertilizantes.
También se avanza aceleradamente en los procesos para emprender la fabricación conjunta de innovadores productos biofarmacéuticos y biotecnológicos cubanos, no solo para satisfacer la demanda de la nación indochina, sino también para exportarlos a otros países de la región.
Por otro lado, abundó, están en marcha relevantes proyectos relacionados con el campo energético, ámbito en el cual Vietnam planteó la posibilidad de contribuir al desarrollo de nuestra capacidad de producción de energía, sobre todo eléctrica, con lo cual estaría también participando activamente en paliar el déficit del país en este rubro. De acuerdo con Polanco, se trabaja igualmente en la identificación de empresas vietnamitas interesadas en la comercialización mayorista y minorista de productos alimenticios, textiles, calzado, equipos electrodomésticos y otros relacionados con la informática y las nuevas tecnologías de la información.
“Pensamos que existe un potencial para esa participación en el mercado cubano y, por supuesto, se harán todos los esfuerzos por parte de nuestras instituciones y empresas para lograrlo en el futuro más cercano posible”, remarcó.
EL PODEROSO MENSAJE DE LA CULTURA
Naciones ambas con una rica cultura y tradiciones preservadas durante mucho tiempo, Vietnam y Cuba tienen en este ámbito el portador de un mensaje que, en opinión del embajador, “puede resultar extraordinariamente poderoso”.
Es por eso que durante el año en curso se prevé un mayor intercambio en diferentes manifestaciones del arte y la literatura, tanto en la danza o la música como en las artes plásticas, lo que permitirá que ambos pueblos puedan apreciar y disfrutar las riquezas culturales del otro.
Al respecto, Polanco anunció el montaje aquí de una exposición de carteles de reconocidos diseñadores cubanos realizados en los años 1960-70 que reflejan la solidaridad con la lucha del pueblo vietnamita contra la agresión del imperialismo, una acción que de manera ejemplar acometió la sociedad cubana y que logró llevar ese movimiento al mundo entero.
“Queremos desarrollar aún más las relaciones en el campo académico, lograr un mayor intercambio de estudiantes, profesores, investigaciones conjuntas, y una participación mayor en el desarrollo de la ciencia, la tecnología y la innovación, sectores en que Vietnam lleva adelante una verdadera revolución”, dijo.
Del mismo modo, comentó, estamos muy interesados en crear en Cuba una cátedra dedicada al pensamiento de Ho Chi Minh, inicialmente en la Universidad de la Habana, pero que después se replicará en otros centros universitarios, y estamos planteando a las instituciones vietnamitas la posibilidad de fundar acá una cátedra Fidel Castro Ruz.
La vida, obra y pensamiento de ambos líderes deber ser objeto de estudio permanente y de reflexión, consideró Polanco, quien subrayó que “la rica historia que nos une está basada en la lucha revolucionaria de nuestros pueblos contra el imperialismo y la construcción socialista, y es uno de los más firmes baluartes que sostienen nuestras relaciones”.
Por último, el embajador se refirió a los crecientes vínculos entre provincias y ciudades de Cuba y Vietnam, los cuales contribuyen a fortalecer la autonomía municipal y pueden tener un impacto concreto, eficaz y sustancial en los programas de desarrollo local, en correspondencia con los objetivos e intereses determinados.
“Esto es algo que debe consolidarse en el futuro inmediato, pues existe mucho campo por avanzar, potencial, e interés por parte de varios territorios vietnamitas en aprovechar estas oportunidades”, manifestó.
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