martes 16 de septiembre de 2025

ESCÁNER: Colombia, destino prometedor (+Fotos +Info)

Bogotá (Prensa Latina) Naturaleza exuberante por doquier, cultura vastísima, costas en el océano Pacífico y el mar Caribe, hechizantes leyendas de conquistadores sobre lugares míticos bañados en oro, excelente gastronomía: Colombia parece tenerlo todo para convencer a un turista deseoso de buenas experiencias.
Por:
Ivette Fernández
Corresponsal jefa en Colombia

Las cifras de 2024 le dieron la razón a quienes así piensan, pues en ese año el país reportó un crecimiento del 148 por ciento en el arribo de vacacionistas en comparación con los índices alcanzados inmediatamente antes de la aparición de la Covid-19, mientras que la tasa mundial fue de un 99 por ciento de recuperación.

Aun cuando se mantienen en la preferencia de los viajeros los destinos tradicionales, dígase Cartagena, Bogotá, Medellín, Santa Marta, Barranquilla y San Andrés, otras ciudades empiezan a despertar interés gracias al desarrollo de la infraestructura y al diseño de planes por parte del gobierno para mostrar y explotar sitios tan buenos como los ya conocidos.

Para quienes aman el turismo fluvial, existe ya la posibilidad de navegar el río Magdalena en un crucero con paradas en atrayentes poblados cuyos encantos comienzan a exhibirse con mayor fuerza en el departamento homónimo, en la región caribeña.

En ese caso está, por ejemplo, Nueva Venecia, que es un pueblo flotante con palafitos construidos sobre el agua, donde los habitantes se movilizan en canoas o lanchas debido a la inexistencia de calles.

También figura la posibilidad de conocer Mompox que, gracias a la encantadora arquitectura colonial, su centro histórico mereció la declaratoria Monumento Nacional en 1959 y Patrimonio de la Humanidad por las Unesco en 1995.

Magangué tiene asimismo sus propios atractivos, con paisajes de naturaleza virgen y manifestaciones de tradiciones locales.

Por otro lado, las autoridades de Colombia sí que han buscado sacar partido a la obra del Premio Nobel de Literatura Gabriel García Márquez con el ofrecimiento de destinos que muestran a los visitantes los lugares que sirvieron de inspiración al novelista.

En ese caso esta Aracataca, pueblo de donde era oriundo el escritor, ahora rebautizado como la Cuna del Realismo Mágico.

De no conocerse la historia, podría pasar por un sitio lindo y ordinario, pero no. Tiene allí el vacacionista la posibilidad de escudriñar la Casa Museo Gabriel García Márquez y la Casa del Telegrafista, lugar de trabajo de su padre y donde se colocó una escultura de Úrsula Iguarán, la matriarca de Cien Años de Soledad.

Como si fuera poco, hay un Monumento a Remedios La Bella, aquella joven surgida de la imaginación del Gabo que hechizó a todos con su proverbial y letal belleza, pero cuya levedad en la tierra le hizo ascender hacia el cielo y desaparecer para siempre en él.

Otra de las fortalezas del turismo emergente en Colombia está en el avistamiento de aves.

El deseo de apreciar la belleza y el canto de esos animales atrae cada año a cientos de personas a lugares que un foráneo no suele reconocer en su aprendido repertorio de ciudades colombianas.

Algunas de las preferidas para esta actividad son Minca (Magdalena), Quimbaya (Risaralda), Mitú (Vaupés), Jardín (Antioquia) y Yotoco (Valle del Cauca).

El amor por la naturaleza avala esos destinos y también que, durante el Global Big Day, un evento para registrar aves a nivel mundial, el país ocupó el primer puesto con un total de mil 560 especies inscritas.

No obstante el interés que empieza a crearse en torno a nuevas ciudades y poblados, el país tiene mucho más por ofrecer, a juicio de expertos.

OPORTUNIDADES CRECIENTES

Según comentó a Prensa Latina el presidente de la Confederación de la Industria Turística de Colombia, Rudesindo Moreno, la época post Covid-19 facilitó la aparición de destinos emergentes que responden a las tendencias del turista contemporáneo, como sitios libres de aglomeración, alojamientos personalizados y con opciones de ecoturismo.

En el caso específico del Huila, en el suroeste, han surgido destinos como Paicol, Baraya, Saladoblanco y Palermo con actividades de contacto con la naturaleza; y 22 municipios con ofertas de agroturismo relacionadas con el cultivo del café, cacao y la apicultura, mencionó.

Igualmente, otros 12 municipios ofrecen actividades de bienestar que permitan interconectar la triada: cuerpo, mente y espíritu mediante procesos para mitigar la depresión, soledad, angustia, el estrés familiar, laboral y financiero, aseguró.

Estimó que para consolidar las ambiciones que se tienen en la industria sin chimeneas, es preciso potenciar varias cuestiones.

“El turismo como actividad económica requiere de estabilidad jurídica en los ámbitos fiscal y laboral, con gravámenes que se puedan sufragar, pero que también permitan la formación del acervo patrimonial del empresario con equidad social”, planteó.

Señaló que además se requiere de seguridad para el turista y para las comunidades locales, por lo cual se debe trabajar en la creación de la percepción de no sufrir el atraco callejero, el robo o el secuestro, que son crímenes con una incidencia elevada en algunos de los municipios de la nación.

En el caso del turismo receptivo, expresó, se debe apoyar la creación de circuitos regionales, de planes multidestino, que permitan una mayor distribución del aporte del turista al desarrollo socioeconómico del país.

En cuanto al incremento del número de llegadas de turistas a Colombia, valoró que esto ocurre por dos motivaciones principales.

La primera, mencionó, se aprecia cuando los turistas de origen internacional llegan motivados por la conveniencia de la tasa de cambio, y eso les permite visitar destinos emergentes soportados fundamentalmente por la oferta de actividades de contacto con la naturaleza e interactuación con las comunidades locales en temas relacionados con la gastronomía, bienestar, música, danza o artesanía.

Por otra parte, los turistas receptivos nativos colombianos que residen en el exterior, que continúa siendo el segmento más fuerte, viajan para compartir con la familia el periodo vacacional, fiestas, ceremonias fúnebres, tratamientos médicos, e, igualmente, refrescar las finanzas de la familia, apuntó Moreno.

PLANES BENEFICIOSOS

Además de los provechos que aún pueden proporcionar el turismo cultural y de naturaleza, el gobierno del Cambio busca desarrollar la infraestructura en el golfo de Morrosquillo, en el sur del mar Caribe, con ampliación del aeropuerto y gestión de playas.

Actualmente se acometen las obras de extensión y mejora en la terminal aérea del municipio de Tolú, en el departamento de Sucre.

Las mejoras a la infraestructura permitirán al aeródromo recibir aeronaves tipo jet de hasta de 180 pasajeros, al dar paso a avances sustanciales en la conectividad aérea y las oportunidades para la región.

Actores de la cadena turística se beneficiarán de esas obras, previstas para finales de este año, y cuyo objetivo es impulsar un incremento de las llegadas de turistas nacionales y extranjeros a Tolú, el golfo de Morrosquillo y zonas turísticas cercanas como los Montes de María.

Adicionalmente, se trabaja en el diseño de ordenamiento de playas, se ejecutaron entrenamientos en salvamento acuático con certificación internacional a personal en siete municipios del golfo de Morrosquillo, y entrega de dotaciones y equipos a seis alcaldías con vistas a poner en marcha aspectos de seguridad para los bañistas.

Otra buena noticia es el establecimiento de una alianza entre el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo de Colombia (Mincit) con Jetsmart Airlines, la aerolínea de mayor crecimiento en Sudamérica, para fortalecer el turismo en el suroccidente del país.

La colaboración busca incentivar los viajes desde y hacia la ciudad de Cali, puerta de entrada y centro de conexión aérea en esa región, mediante una campaña nacional de visibilidad que promoverá los principales destinos y rutas operadas por la mentada compañía aérea.

“La diversificación del turismo en Colombia se basa en el reconocimiento y la capacidad de potenciar los territorios que tienen todo para crecer. El suroccidente colombiano ha demostrado un dinamismo excepcional, con un aumento constante de viajeros y una oferta cada vez más diversa”, declaró la ministra del ramo, Diana Morales.

Gracias al acuerdo, desde Cali Jetsmart implementó cinco nuevas rutas directas hacia Bogotá, Medellín, Cartagena, Santa Marta y San Andrés, con más de 58 frecuencias semanales.

Se trabaja asimismo en la modernización del aeródromo José Celestino Mutis, en el departamento de Chocó, en el noroeste y en el nuevo aeropuerto de Manizales que, a juicio del gobierno, permitirá un mayor desarrollo turístico del departamento de Caldas (centro) y del sur de Antioquia (noroeste).

El incremento de las operaciones aéreas es una de las grandes cartas con las que hoy cuenta Colombia para crecer en materia turística.

Solo en 2024, de acuerdo con cifras de la Aeronáutica Civil, se movilizaron 56 millones 560 mil pasajeros por todas las terminales aéreas del país.

Dicho guarismo representó un incremento de siete millones 97 mil en comparación con 2023 y en términos porcentuales indica una variación año a año del 14,3 por ciento.

La apuesta por impulsar el crecimiento de la industria turística es evidente en Colombia, un país que por naturaleza propia tiene los encantos necesarios para deslumbrar.

arb/tdd/ifs

Colaboraron en este trabajo:
Teyuné Díaz Díaz
Jefa Redacción de Economía
Amelia Roque
Editora Especiales Prensa Latina
Laura Esquivel
Editora Web Prensa Latina
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