Por Mariela Pérez Valenzuela
Corresponsal jefe en Repùblica Dominicana
Son estos el actual primer mandatario Luis Abinader; Leonel Fernández, que ocupó el cargo en tres mandatos, y Abel Martínez, exalcalde de Santiago de los Caballeros, la segunda provincia más grande del país. Abinader parte como favorito en la contienda a la que están convocados más de ocho millones de ciudadanos, aunque la sombra de la abstención rodea el proceso, si se consideran los resultados de los comicios municipales de febrero último, cuando votó cerca de 47 por ciento.
Además del presidente y el vice, también serán electos los 190 diputados y 42 senadores que integran el Congreso Nacional, 20 representantes al Parlamento Centroamericano (Parlacen) y otros funcionarios públicos.
Abinader, de 56 años de edad, procedente de una rica familia de origen libanés, es el posible vencedor de estos comicios que podrían mantenerlo en el gobierno hasta 2028, tras cuatro años de gestión en que, de manera periódica, medios independientes analizan su aprobación por la ciudadanía, casi siempre en torno al 60 por ciento.
Casado, padre de tres hijos, asumió la jefatura de gobierno en plena pandemia de la Covid-19 con cerca del 53 por ciento de los votos. Ahora vuelve a ser candidato por el Partido Revolucionario Moderno (PRM), que arrasó en las elecciones municipales de febrero pasado, cuando obtuvo 121 alcaldías de 158 en pugna.
Nacido el 12 de julio de 1967 en Santo Domingo, la capital, es graduado en Economía por el Instituto Tecnológico de Santo Domingo e hizo estudios de posgrado en Finanzas Corporativas e Ingeniería Financiera en la Universidad de Harvard, en Estados Unidos.
La primera vez que aspiró a jefe del Ejecutivo fue en 2016 cuando perdió ante Danilo Medina, del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Asumió como jefe de Estado el 16 de agosto de 2020. Entonces prometió enfrentarse a la corrupción y la impunidad.
Uno de sus rivales en la actual contienda es Leonel Fernández, del partido Fuerza del Pueblo (FP), quien durante la campaña mantuvo casi constantes denuncias y ofensas contra el dignatario, las que encontraron el silencio como respuesta.
Fernández, en busca de un cuarto mandato, es considerado el más experimentado de los aspirantes, pero, según encuestas de varias firmas, algunas muy reconocidas, quedaría en un segundo lugar, alejado de lo que se espera obtenga Abinader.
Con 70 años, doctor en Derecho, Fernández presidió este país en los períodos 1996-2000, 2004- 2008 y 2008-2012, por el PLD.
En octubre de 2016 renunció a esa agrupación en la que se formó y militó por 46 años y fundó la FP con el objetivo de convertirse, otra vez, en presidente.
Orador, ensayista, periodista y escritor, Fernández posee una sólida formación cultural, en tanto que creció en la política con el patrón del fundador del PLD, el expresidente Juan Bosh (1963).
Fernández acompañó a Bosh como aspirante a la vicepresidencia y en 1995 fue proclamado candidato presidencial. En 1996 ganó los comicios como primer dignatario salido de las filas del PLD y uno de los más jóvenes de América Latina.
Aunque pretende retornar al gobierno, la última encuesta de la firma Gallup lo sitúa en la segunda posición en intención de voto tras Abinader (60 por ciento), con un 24,6 por ciento de los sufragios.
El tercer aspirante presidencial, aunque con bajas posibilidades de triunfo, es Abel Martínez, quien quisiera el retorno del PLD al gobierno nacional, aunque las intenciones de voto indican que solo obtendrá un 11,1 del sufragio.
Su credencial política más valorada es su gestión desde 2016 hasta ahora como alcalde de la ciudad de Santiago de los Caballeros, la segunda en importancia de este país. Fue reelecto en el cargo en 2020.
Analistas del comportamiento electoral dan pocas chances a este graduado en Derecho, profesor y político. A sus 52 años de edad cuenta con 25 años de experiencia en las lides políticas, iniciadas cuando en 1999 lo promovieron a fiscal titular de Santiago de los Caballeros. En 2002 fue electo diputado, curul que mantuvo durante 14 años.
A su favor tiene Martínez su continuo ascenso por distintos sectores políticos del país. En 2010, alcanzó la presidencia de la Cámara de Diputados, lo que lo convirtió en el más joven de los titulares parlamentarios en América Latina y El Caribe.
Notable fue su rol en decisiones legislativas, entre ellas la aprobación de leyes que contribuyen a fortalecer la transparencia en la administración pública y de la democracia, la Ley de Control de Armas, o el Código Civil.
Para los santiagueros, la gestión de Martínez puede considerarse como un modelo municipal.
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