Daimarelys Pérez Martínez
De la redacción de Cultura
Por orden de fecha, los Globos de Oro 2024 inauguraron la carrera de este año, siguiéndole los de la Crítica, y en ambos, una gran ganadora: la historia del denominado padre de la bomba atómica “a los ojos del público”, Robert Oppenheimer.
Nunca antes el apellido del físico estadounidense de origen judío resonó tanto en esta época moderna como ahora, pero desde que el director británico Christopher Nolan “Memento” (2000) o “Dunkerque” (2017), decidió llevar a cabo ese proyecto fílmico, la película despuntó entre las más atractivas de 2023.
La cinta ganó en las categorías de Mejor película de drama, Mejor director, Mejor actor, Mejor actor de reparto y Mejor banda sonora en los Gala de los Globos de Oro.
También los lauros concedidos por la Crítica Cinematográfica resultó otro acontecimiento para ese largometraje y su equipo, al obtener las distinciones de Mejor película, Mejor director, Mejores efectos visuales, Mejor montaje, Mejor conjunto actoral, Mejor fotografía y Mejor actor de reparto.
Es decir, el impacto del filme se convirtió en una verdadera “bomba”, pero de las que no hacen daño, sino todo lo contrario, por lo menos para la hoja de vida de cada uno de los integrantes de la realización. Un fenómeno arrasador y estrepitoso.
Fue nominada, además, a 13 premios de la Academia Británica de las Artes Cinematográficas y de la Televisión, entre ellos, Mejor película, Mejor director y Mejor actor.
Tanto como “Barbie”, y en televisión “Succession”, la cinta de Nolan fue de lo más visto el pasado año.
Una película biográfica de suspenso británico-estadounidense, escrita también por el avezado cineasta, basada en American Prometheus, una biografía de 2005 a cuatro manos: Kai Bird y Martin J. Sherwin, la cual narra la vida de J. Robert Oppenheimer, un físico teórico, pieza fundamental en el desarrollo de las primeras armas nucleares y parte del Proyecto Manhattan, por tanto, marcó el comienzo de la era atómica.
Lo anterior ya es archisabido, pero a raíz de esta gran revelación cinematográfica aparecieron elementos menos expuestos a las redes sociales y a los criterios de la prensa.
FRASE DE “OPPENHEIMER” CONVERTIDA EN CÉLEBRE En la vida estamos constantemente improvisando y en este caso se trata de una de las tantas escenas controvertidas del filme, cuando aparece una cita icónica, ni siquiera contemplada en la versión original del libreto.
Surgió de la ocurrencia del actor James Remar y fue tal su preparación para el papel de secretario de Estado Henry Stimson, que su imaginación y creatividad maravillaron a Nolan y al resto del reparto.
Conscientes todos de aquella naturalidad del intérprete, no supieron cómo reaccionar y la escena se circunscribió a su negación de lanzar la bomba atómica en Kyoto.
Con un alto nivel de cinismo, el personaje de Stimson bromea con que fue en esa ciudad donde pasó su luna de miel para justificar así la elección de otros objetivos del ataque, que terminaron en Hiroshima y Nagasaki.
Por detalles como ese es que el filme resulta discutible, polémico o si se quiere, digno de análisis en una clase de historia política, pues se trata de un diálogo peliagudo basado en el personaje original (Stimson), quien, además, ilustra muy bien la posición de Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial.
SUCESO A LA PAR CON “OPPENHEIMER”, PERO TELEVISIVO
La temporada de premios terminó para las mejores series con la entrega de los galardones a la excelencia en la televisión estadounidense, los Emmy.
Aunque estos llegaron retrasados, pues debían hacerse a mediados de septiembre del recién finalizado año (el 18 de ese mes para ser más exacto), y la huelga de guionistas lo impidió, aunque no detuvo la avalancha de trofeos para la serie más premiada.
“Succession”, la más seguida y aplaudida, con sus cuatro temporadas y 39 episodios en total (10 en la primera, segunda y cuarta, y 9 en la tercera).
La serie (2018-2023) es un drama que gira en torno a la familia del magnate Logan Roy y sus cuatro hijos, propietarios de uno de los conglomerados de medios de comunicación y entretenimiento más importantes del mundo, la empresa Waystar RoyCo.
Sus problemas recaen en la lucha por el control de la compañía en medio de la incertidumbre sobre la salud del patriarca de la familia y el planteamiento sobre quién será su sucesor.
Reza un viejo refrán “No hay mal que por bien no venga”, trasmitido de forma oral desde hace muchas generaciones, y en esta racha de premios solo hubo que esperar un hueco vacío en el calendario, después del paro, para celebrar la entrega de los Emmy (15 enero de 2024) con la preferencia puesta en esa serie.
Tarde, pero seguros, llegaron los lauros para “Succession” (HBO), ganadora, o mejor, muy victoriosa, primeramente en la 81 edición de los Globos de Oro.
En ese prestigioso certamen conquistó las categorías de Mejor serie drama, Mejor actriz en serie drama, Mejor actor en serie drama y Mejor actor de reparto.
Con respecto a los Emmy, “Succession” obtuvo su galardón en Mejor serie dramática, Mejor actriz principal en serie dramática, Mejor actor principal en serie dramática, Mejor actor de reparto en serie dramática, así como, Mejor guion de serie dramática y Mejor dirección de serie dramática.
También llegó el final para “Succession. Así lo quiso su creador, Jesse Amstrong, quien prefirió cerrar capítulos con la muerte del patriarca y dejar la serie en un tope bien alto, antes de estirar la cuerda y perder credibilidad.
Con la partida de Logan Roy (Brian Cox), para algunos “el origen de todos los problemas e intrigas en la familia”, más bien a lo Rey Lear, quedó de sucesor el yerno del magnate, Tom Wambsgans (Matthew Macfadyen), puesto que sin chistar le quitó a su mujer (Sarah Snook).
Su guionista Armstrong en la gala de los Emmy habló de la relación entre las familias, el poder y los medios de comunicación.
Estamos tristes de que esto acabe, pero muy honrados, nos extrañaremos, pero mejor que quede aquí, señaló.
Con estas dos obras del cine y la televisión, consideradas por la mayoría como lo mejor de los últimos años, tanto en filme (Oppenheimer), como en serie (Succession), solo estamos a la espera de los Oscar para conocer quiénes se llevarán la estatuilla dorada.
Aunque por el camino todavía faltan los Bafta británicos y unos cuantos sindicatos, hay fechas señaladas en febrero, como el 22 cuando la Academia inicie la votación para los ganadores del Oscar 2024.
Y mientras, en el intermedio entre ese día del próximo mes y el 27, que pauta el fin de la votación, otras agrupaciones de artistas afiliados elegirán a sus mejores diseñadores de arte, de vestuario, a sus guionistas, productores, sonidistas, fotografía, edición, en fin, un carnaval de coronaciones, sellado por el premio gordo: el Oscar.
arc/mml/dpm