El gigante euroasiático diseña mecanismos para que la IA se convierta en el recurso más importante en aras de lograr objetivos nacionales de desarrollo, garantizar el fortalecimiento de la capacidad de defensa del país, el avance cualitativo de la economía y de los sectores sociales, la administración pública y el crecimiento en la innovación.
“Para resolver con éxito estas metas, Rusia debe convertirse en un líder mundial no solo en creación, sino también en la penetración de la inteligencia artificial en todas las esferas de nuestras vidas, sin excepción ni escala social”, sentenció el presidente ruso, Vladimir Putin, en diciembre del pasado año durante la celebración de la Conferencia Internacional “El viaje al mundo de la inteligencia artificial”.
El jefe de Estado ruso instó a los máximos representantes de su Gobierno a diversificar los resultados obtenidos hasta el momento en el sistema bancario, el comercio electrónico y la administración pública, hacia otras áreas como la sanidad, la industria, el transporte y el turismo, “en todos los ámbitos, debería estar terminada en 2030”, insistió.
Putin aseguró que aun cuando a la nación eslava le queda un camino largo por recorrer, la experiencia adquirida en la aplicación práctica de la IA tiene demanda en diferentes países del mundo.
“Hoy en día, los Estados de Asia, África, América Latina, nuestros socios de la Comunidad de Estados Independientes, la Unión Económica Euroasiática, la Organización de Cooperación de Shanghái, los BRICS y otras asociaciones están formando sectores prometedores de la economía e introduciendo innovaciones”, refirió.
Rusia, por supuesto, comparte y apoya el deseo común de desarrollo, y las empresas nacionales tienen la intención de seguir creando productos y servicios basados en inteligencia artificial tanto para ellas como para el mundo entero, argumentó el líder ruso.
En ese sentido, Putin asumió el compromiso de proporcionar a los países del Sur y del Este Global asesoramiento y asistencia técnica en el campo de la inteligencia artificial.
Por supuesto, esperamos los logros de nuestros socios para implementar proyectos conjuntos basados en el acceso igualitario al conocimiento, la tecnología y los logros científicos. Esta prioridad está fijada en la Estrategia Nacional de Inteligencia Artificial, sentenció el mandatario de la nación eslava.
AL SERVICIO DE LA SALUD
Siguiendo los patrones de desarrollo de la IA fijados por el jefe de Estado, la empresa rusa NtechLab se convirtió en pionera en la creación de servicios de análisis de vídeo basados en inteligencia artificial, mediante el diseño de una red neuronal para la detección temprana de condiciones previas de la enfermedad de Alzheimer, demencia y otros padecimientos neurodegenerativos.
El director ejecutivo de la compañía, Alekséi Palamarchuk, declaró en julio de 2024, en del Foro Económico Internacional de San Petersburgo, que este proyecto de red neuronal ayudará a identificar los trastornos degenerativos en el cerebro.
“Los cambios cerebrales que conducen al Alzheimer y la demencia pueden identificarse diez años antes de que aparezcan las manifestaciones clínicas y pueda comenzar el tratamiento preventivo”, afirmó entonces el ejecutivo.
Palamarchuk explicó que la red neuronal, entrenada en colaboración con médicos de la más alta categoría en los grandes hospitales y centros médicos rusos, procesará imágenes del cerebro por tomografía computarizada y resonancia magnética.
Antes de este nuevo programa, NtechLab ya había recibido un certificado para una red neuronal que puede diagnosticar accidentes cerebrovasculares isquémicos y hemorrágicos.
EN EL MUNDO MILITAR RUSO
Otro de los renglones donde se aplica la inteligencia artificial en Rusia es en la industria militar, con especial utilización en la actual operación militar especial en Ucrania, donde los sistemas de reconocimiento de objetivos basados en IA permiten a los drones de las tropas rusas apuntar de forma independiente a los equipos enemigos.
El comandante de las Tropas de Misiles Estratégicos de Rusia, coronel general Serguéi Karakáyev, explicó que la aplicación de estos recursos tecnológicos ha permitido a los vehículos aéreos no tripulados distinguir un coche de un tanque, un lanzacohetes múltiple de una bicicleta.
Agregó que la IA en el campo de los drones de combate está actualmente sólo comenzando a utilizarse, pero un gran número de desarrolladores trabajan en la implantación de estos sistemas.
Karakáyev reconoció que la inteligencia artificial ya se utiliza en Rusia para diversas tareas cotidianas en el mantenimiento de los complejos de misiles, sin embargo, llamó la atención de que por el momento no es aconsejable confiarle la toma de decisiones sobre el uso de armas nucleares.
“Desde el punto de vista de la toma de decisiones sobre el uso de armas nucleares, sustituir a un ser humano es actualmente inoportuno. Los procesos de control de la inteligencia artificial, que se introducen gradualmente en una serie de sistemas automatizados, aún no se han estudiado y elaborado por completo. Probablemente solo podemos hablar del abandono de ciertas operaciones rutinarias realizadas por turnos de guardia”, aclaró el jefe militar.
En ese sentido, añadió que la IA se emplea en los nuevos sistemas de misiles para el control remoto y la supervisión de los puestos de mando y los lanzadores, lo cual reduce significativamente la carga de los operadores para recopilar y resumir los datos.
ROSATOM Y EL DESARROLLO CUÁNTICO
La Corporación Estatal de Energía Atómica Rosatom despliega el programa Quantum, una hoja de ruta que persigue la creación de infraestructura, la compra de equipos, la dotación de personal para los laboratorios, la puesta en marcha del centro, es decir, la fabricación de la computadora cuántica.
El jefe de la oficina de proyectos de tecnologías cuánticas de la compañía, Ruslán Yunusov, añadió que, como consecuencia de las sanciones occidentales, Quantum presenta problemas de infraestructura que van camino a su solución.
“En la siguiente etapa, por supuesto, se prestará más atención al trabajo de los científicos en la infraestructura que se ha creado. Y más aún, si miramos tres o cuatro años hacia delante, por supuesto, necesitaremos tener jóvenes talentosos en gran número, pero para que aparezcan en tres o cuatro años, debemos comenzar ahora a prepararlos”, sentenció el especialista en relación a la superación del personal.
Yunusov añadió que para el cliente promedio puede parecer poco significante los problemas que resolverá un ordenador cuántico; hasta el momento lo más conocido es que se utiliza para la optimización del problema, el desarrollo de nuevos materiales y nuevos fármacos.
“Lo mismo ocurrió con las computadoras clásicas cuando se construyeron por primera vez. Había muchas hipótesis de ese tipo, como que bastarían cuatro ordenadores para todo el planeta Tierra, porque se resolverían las tareas que existen y todo iría bien”, recordó el científico.
En ese sentido, acotó que efectivamente, estas tareas fueron resueltas. Sin embargo, han surgido tantos desafíos nuevos que nadie siquiera imaginaba. Es decir, en ese momento, nadie imaginó que la principal potencia informática global se gastaría en juegos de computadora o en la minería de criptomonedas, argumentó.
Estos mismos desafíos pretenden resolver el programa de IA Quantum con su ordenador cuántico. “Sabemos las tareas que podríamos resolver ahora si tuviéramos uno potente. Pero cuando lo tengamos potente, veremos otras tareas”, confirmó Yunusov.
PELIGROS EXGERADOS
Uno de los principales expertos rusos y mundiales en tecnologías informáticas, de la Academia de Ciencias de Rusia, Ígor Kaliáyev, manifestó que el peligro para la humanidad de una inteligencia artificial potente está seriamente exagerado.
“Como demuestra la historia, incluida la moderna, no gana quien es más listo y más avanzado tecnológicamente, sino quien dispone de medios de derrota sencillos y baratos, y en cantidades masivas, y quien puede sobrevivir y operar en ausencia de todas las ventajas de la civilización”, acotó.
El científico afirmó que si la IA amenazara a la humanidad, simplemente se la desconectará de la fuente de alimentación o se la privará de piezas de repuesto consumibles.
“Si una inteligencia artificial potente, cuya aparición ahora temen muchos, se convierte en una amenaza para la humanidad, simplemente se desconectará de la electricidad, lo que puede hacerse de varias maneras, tras lo cual se convertirá en un montón de chatarra”, explicó Kaliáyev.
El académico ruso argumentó que una IA superpotente no podrá existir no sólo sin electricidad, sino también sin agua que refrigere al superordenador, aceite que lubrique los ventiladores, y cables a través de los cuales se conectaría a internet.
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