La Asamblea General de las Naciones Unidas exigió nuevamente el levantamiento del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por el Gobierno de Estados Unidos contra Cuba desde hace más de medio siglo.
Por trigésima tercera ocasión, el máximo órgano deliberativo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) mostró su rechazo al genocidio más prolongado de la historia del mundo.
A la luz del derecho internacional contemporáneo, las disposiciones de Washington contra el país caribeño constituyen un crimen de lesa humanidad. La Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio, aprobada en 1948, en su Artículo II tipifica como tal el acto “perpetrado con la intención de destruir total o parcialmente a un grupo nacional, étnico, racial o religioso”.
El periódico refleja los resultados de la reciente votación en el seno de la ONU, e ilustra daños y perjuicios con fundamentación económica.
En esta oportunidad, fueron 165 votos a favor, siete en contra y 12 abstenciones, pese a las presiones de Washington, denunciadas por el canciller cubano, Bruno Rodríguez. En declaraciones a periodistas, el ministro calificó la victoria de la nación antillana como un “resultado extraordinario en medio de la situación internacional más peligrosa y difícil, frente al despliegue militar brutal de los yanquis en el Caribe y en el Pacífico, frente a una campaña tóxica en las redes y en la prensa”.
Sobre el ámbito empresarial, la presente edición de Negocios en Cuba destaca las conversaciones con Belarús a fin de crear firmas mixtas en la rama industrial, así como el rescate de producciones internas; entre ellas, la fabricación de útiles del hogar y envases plásticos para distintos usos, y la elaboración de pastas alimenticias frescas. Esto último también muestra las transformaciones en curso de cara a diversificar los actores económicos en la isla mediante el establecimiento de sociedades unipersonales de responsabilidad limitada, estatales y privadas.
Mientras, el turismo es visto desde la óptica general del Gobierno –que avala las proyecciones de recuperación gradual–, las expectativas en torno a la Fiesta Internacional del Vino, con sede en La Habana, e historias de sitios reconocidos por los visitantes foráneos, lo que incluye la selección del Hotel Nacional de Cuba entre las mejores ofertas de la hostelería laureadas en los Premios Mundiales del Viaje (World Travel Awards, en inglés).
En las páginas dedicadas a la ciencia y la técnica, aparecen dos alertas importantes a partir de hallazgos investigativos: los brotes de intoxicación en América Latina por ingestión de bebidas alcohólicas adulteradas, y el más reciente diagnóstico sobre las especies marinas que están en riesgo dentro de las aguas territoriales cubanas.
La habitual sección Economía y Finanzas aborda el intercambio desigual en el comercio internacional, un “provechoso vehículo” para la expoliación de las riquezas del Sur Global, cuyas secuelas continúan en ascenso.
Por último, la publicación analiza el preocupante comportamiento del ciclo del agua en la Tierra, con negativos efectos en cascada sobre las sociedades, el medioambiente y las economías, como sustentó la Organización Meteorológica Mundial.